Medición de consumo de gas

A diferencia del suministro eléctrico, donde existen múltiples equipos, instalaciones y electrodomésticos que demandan energía, en el caso del suministro de gas el consumo se suele limitar a tres usos: cocina, agua caliente sanitaria y calefacción. Si bien existen dificultades para monitorizar de forma individual estos usos, no suele resultar de interés dado que las medidas para reducir el consumo de gas se centran en dos tipos de actuaciones: la mejora de las calderas y la mejora del aislamiento térmico de la vivienda.

Si se desea conocer el consumo de gas global se puede realizar la lectura a través del contador. Al igual que los contadores eléctricos, los contadores de gas pueden ser de alquiler o de compra, siendo la primera opción la más frecuente, y están dentro de nuestra vivienda o en el edificio. En el caso de los contadores de alquiler, son propiedad de la empresa distribuidora de gas, responsable de tomar la lectura del contador, con independencia de la compañía comercializadora, siendo esta última la que factura la energía consumida.


 Existen dos tipos de lecturas del contador: